Devotos diante de imagem da "Difunta Correa".
Conforme prometido, hoje destacamos o culto
popular em torno da “Difunta Correa”, muito presente na Argentina, mas também
no Chile. Reproduzimos a seguir um informe sobre a “Difunta Correa” do Museu
Histórico e Arqueológico de Posadas, Província de Misiones:
“En el transcurso del año 1835 un criollo de apellido Bustos fue
reclutado en una levita para las montoneras de Facundo Quiroga y llevado por la
fuerza a La Rioja. Su mujer, Maria Antonia Deolinda Correa, desesperada porque
su esposo iba enfermo, tomó a su hijo y siguió las huellas de la montonera.
Luego de mucho andar – cuenta la leyenda – y cuando estaba al borde de
sus fuerzas, sedienta y agotada, se dejó caer en la cima de un pequeño cerro.
Unos arrieros que pasaron luego por la zona, al ver animales de carroña que
revoloteaban se acercaron al cerro y encontraron a la madre muerta y al niño
aún con vida, amamantándose de sus pechos. Recogieron al niño, y dieron
sepultura a la madre en las proximidades del Cementerio Vallecito, en la cuesta
de la sierra Pie de Palo.
Al conocerse la historia, comenzó la peregrinación de lugareños hasta la
tumba de la “difunta Correa”. Con el tiempo se levantó un oratorio en el que la
gente acercaba ofrendas. “La difusión de sus milagros ya tradicionales se ha
extendido por todo San Juan: los poetas y cantores populares le dedican sus coplas
y canciones, los hombres de campo le piden protección para sus cosechas, los
arrieros, con quienes tiene una deuda, la consideran su protectora, hacen sus
peligrosos viajes a través de las serranías y quebradas bajo su amparo, las
madres que por su debilidad carecen del necesario alimento para sus
pequeñuelos, elevan sus oraciones fervientes a ella para que nutra sus pechos
escuálidos.”
Este mito “constituye uno de los casos más interesantes de las creencias
populares, pues constituye un mito ancestral indígena que no pudo ser
reinterpretado por la Iglesia Católica debido a que no existe ningún mito
equivalente en la cultura occidental cristiana para que pueda ser ‘re-modelado’.
Esto es debido a que la estructura del mito es la sobrevivencia de un niño que
mama los pechos de la muerta. Mamar de un cadáver, es decir tomar vida de la
muerte, no existe como estructura en la mitología occidental cristiana”.
A partir de la década de 1940, se hizo su santuario en Vallecito
(provincia de San Juan).”
Em pequenos altares montados, muitas vezes, à beira de rodovias, devotos deixam garrafas de água para a "Difunta Correa".
Na próxima postagem abordaremos o culto a "Gauchito Gil".
Prof. Paulo Renato da Silva.